jueves, 28 de abril de 2016

Terceros molares,quitarlas o no, una buena cuestión.

La etapa que comprende desde los 17 a los 25 años es esa en la que los jóvenes intentan dejar de ser niños y esperan ansiosos pasar a la edad adulta, para concretamente tener más juicio. De aquí el nombre "muelas de juicio" (o terceros molares).

Además, si lo traducimos a otros idiomas obtenemos otra evidencia. Por ejemplo, sin irnos muy lejos en catalán se llaman "queixals del seny" (muelas de la cordura) y en inglés "wisdom teeth" (dientes de la sabiduría).

Ya sabéis a que se debe su nombre pero ¿Sabéis si hay que quitarlas o no? ¿O por qué se requiere a menudo su extracción?

Ciertamente no hace falta pero en la mayoría de los casos los terceros molares no tienen espacio suficiente para crecer correctamente. Si el espacio es muy reducido incluso pueden no erupcionar pero este caso es muy doloroso porque le causarán grandes problemas por debajo de la encía al paciente.

Radiografía en la que se señala un tercero molar inferior.

Este tema ha llevado a cabo muchos debates entre expertos en la materia, los odontólogos. Algunos de ellos optan por su extracción temprana como método de prevención a los problemas que podrían causar en el futuro. Pero algunos otros ponen en duda esta solución porque es posible que se realice un cirugía en un caso en el cual dichas muelas no hubiesen causado ningún posterior problema.

Llegados a este punto podemos preguntarnos ¿Qué es lo correcto?
En realidad, no hay ninguna solución única. Cada paciente es único  y tiene un problema único. La solución es estudiar cada caso y determinar qué solución sería la más beneficiosa para el paciente, teniendo en cuenta sus pros y sus contra y calibrando los resultados para optar por la solución menos perjudicial. Esto depende del caso y del paciente (edad, alergias..).


Radiografía que muestra un quiste, el cual,
solo pudo ser reparado mediante cirugía.
Los riesgos de no extraer las muelas de juicio impactadas (en la encía) son numerosas: desarrollo de quistes, infección, dolor, destinación dental, dificultades para mantener una correcta higiene bucal... Pero ¿Cómo sabemos si tenemos los terceros molares impactados?
Para detectar este problema existen distintos signos:
-Inflamación de la zona,
-dolor en la cara o en la mandíbula,
-dificultad para abrir completamente la boca,
-inflamación de los ganglios linfáticos del cuello y
-mal aliento y mal sabor de boca.

Si estás leyendo esta entrada porque tienes un/a hermano/a, hijo/a, sobrino/sobrina o eres tú mismo al que le están causando problemas estas dolorosas muelas, acude a un centro especializado y pide que analicen el caso. Seguro que hacen lo mejor. 

Terminaremos con una serie de mitos sobre los terceros molares. Descubramos si son mitos o verdades:

*Todas las personas tienen muelas de juicio. 
Es un mito, puesto que, en algunas personas no se desarrollan.Y esto no significa que no tengan juicio ;) 

*Toda muela de juicio puede ser extraída.
Es un mito porque hay quienes sí tienen espacio para su desarrollo y si el diente no le genera dolor, inflamación, infección etc. no necesita extracción.

*Se puede saber si una persona va a tener las muelas de juicio antes de que le salgan. 
Es verdad, pero solo con una radiografía, porque sin la imagen es imposible detectar su presencia.

*Cuando salen los terceros molares desalientan los demás dientes.
¡¡Mito!! Muchas personas piensan que si no extraen sus muelas de juicio sus otros dientes se deslindarán. A todos aquellos que piensen esto les invito a usar el sentido común ¿Un solo diente puede desordenar a todos los demás?. Para la mayoría de las personas, el tercer molar no genera preocupaciones, pero es cierto que al ser el último diente puede estar asociado a algunas patologías.

*La extracción del tercer molar es más sencilla en pacientes jóvenes.
Cierto. La edad ideal para una extracción sin problema alguno oscila entre los 16 y los 22, debido a que aún no están completamente desarrollados. A partir de los 23 tiene lugar la formación de la raíz y le dará insensibilidad a la zona en caso de extracción y daño en el nervio.

*Las muelas de juicio son siempre los dientes más grandes y los más difícil de quitar.
Ni mito ni verdad.La verdad está en el hecho de que es el diente más difícil de extraer (simplemente debido a su ubicación) peor el tamaño puede ser variado.

*Quienes no tienen el tercer molar son "mas evolucionados".
¡Verdad! Es una cuestión de evolución del ser humano. Antes eran usados para la masticación de la carne pero actualmente no tienen ninguna función significativa.

*Después de una remoción es imprescindible hacer buches.
Es un mito. Realmente no se pueden hacer buches el primer día de la extracción (ni con vinagre, cono dice un mito popular). Los buches impiden que la sangre se coagule y cuesta más la cicatrización y reparación d ella zona. Entre otros cuidados también se incluye el no fumar por 72 horas, evitar los líquidos fríos, hablar poco y no tocarse la zona (boca y mofletes).

*No hay que cepillarse los dientes después de la operación.
Todo lo contrario, no solo el paciente puede, sino que es casi obligatorio cepillarse los dientes porque la limpieza de la zona debe ser muy rigurosa. Después de la extracción la boca tiene que estar más limpia que nunca.

Terminaremos como es debido, con un buen chiste. Ya sabéis, una buena risa puede cambiarnos el día y nos alegran la vida...


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